El régimen de Nicolás Maduro abandonó por completo las empresas nacionales, dejando así a la deriva a cientos de venezolanos en la lucha por sobrevivir sin servicios básicos adecuados.
Habitantes del municipio Iribarren, en el estado Lara, protestaron por la falta de electricidad, gas doméstico y agua potable. La escasez de los servicios los obligan a vivir en la oscuridad y cocinar con leña.
“Tenemos un colapso en el tubo mayor, las aguas negras se metieron a mi casa y no salen, se me colapsó la casa. Esto tiene más de un año”, relató Mirian Escalona, habitante sector Santo Domingo.
Hidrolara reviso y prometió arreglar el problema, pero no han hecho nada.
Asimismo, en Barquisimeto, la zona de Bella Vista 2 tiene más de 15 días sin electricidad por la explosión de un transformador.
Los residentes han hecho las solicitudes pertinentes en los entes de la gobernación, sin embargo, no han tenido respuestas.
La situación más crítica la han vivido los residentes de la comunidad de Bobare, en la misma capital. Sus habitantes trancaron la principal vía del sector para protestar porque las 48 familias que viven en el lugar tienen 34 días sin el servicio eléctrico.