La crisis eléctrica que afronta Venezuela es cada día más crítica. El abandono en el que se encuentra el sistema eléctrico del país y la falta de un planeamiento eficaz que genere soluciones, ha ocasionado que los apagones en el territorio nacional sean mayores y más prolongados, lo que genera preocupación y descontento en los ciudadanos.
Tal es el caso de la comunidad del Barrio Puerto Rico, en San Juan de los Morros (estado Guárico). Sus habitantes tienen más de 24 horas sin energía eléctrica, luego de que fuertes lluvias provocaran que el cableado de alta tensión se sobrecargara y reventara.
Vecinos del sector aseguran que, hasta la fecha, Corpoelec no les ha brindado solución. “¿Cómo es posible que cuentan con un solo vehículo para atender a más de 200 comunidades que componen la capital de la entidad guariqueña?“, reclamaron los residentes de la zona.
Asimismo, denunciaron que desde hace seis años presentan un bote de aguas servidas, y a pesar de que organismos encargados han intentado resolver el problema, la situación persiste afectando a más de cincuenta familias que, en su mayoría, han padecido problemas de salud como dolores de cabeza, mareos, enfermedades respiratorias y en la piel.
Los múltiples casos de corrupción y negligencia del régimen han resultado en el deterioro del sistema eléctrico nacional, ocasionando apagones con mayor frecuencia que afectan a diferentes estados del país. Guárico no es la excepción. pic.twitter.com/UyuVX9QPzF
— Centro de Comunicación Nacional (@Presidencia_VE) July 9, 2019
En el informe de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, se hizo mención a este tipo de problemas que afectan directamente la vida de los ciudadanos, atribuyendo el problema a la corrupción del régimen de Maduro:
“El desvío de recursos, la corrupción y la falta de mantenimiento en la infraestructura pública, así como la subinversión, han tenido como resultado violaciones al derecho a un nivel adecuado de vida, entre otros, debido al deterioro de servicios básicos como el transporte público y el acceso a electricidad, agua y gas natural”
Expertos en la materia aseguran que el problema eléctrico es consecuencia de una modelo político e institucional que no empezará a cambiar hasta que cese la usurpación.