La ONG SOSOrinoco expresó la necesidad de que el Parque Nacional Canaima sea recategorizado como “peligro crítico” según los criterios de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, que es el órgano técnico asesor de la Unesco.
El Parque Nacional Canaima, Patrimonio Mundial, cumple 58 años de existencia y actualmente se encuentra comprometido por la fiebre del oro, donde una serie de investigaciones realizadas desde el año 2018 han determinado que más de 1.000 hectáreas de sus ecosistemas, equivalentes a más de 1.300 campos de fútbol, han sido destruidos por la minería
“Teniendo en cuenta la crisis humanitaria compleja que atraviesa Venezuela y la política de Estado abiertamente minera y desconsiderada con las leyes ambientales, se hace necesario que Unesco incluya a Canaima en la Lista de Sitios de Patrimonio Mundial en Peligro, como una acción política que empuje a las autoridades a actuar de forma decisiva y asertiva para lograr el cese de las operaciones mineras, ofreciendo alternativas económicas y ecológicamente sostenibles a la población residente del parque nacional”, señaló la organización.
El estudio más reciente es el publicado por el Correo del Caroní junto a Centro Pulitzer el 5 de junio de 2020, contabiliza que 1.033 hectáreas afectadas por la minería y 21 nuevos focos mineros que no habían sido identificados antes.
Desde el estudio de 2018 realizado por SOSOrinoco que identificaba 33 puntos mineros, se escaló a 59 focos mineros con el más reciente monitoreo de Correo del Caroní en 2020.
“Canaima está siendo asediado por el acelerado crecimiento de la minería en sus fronteras, que se ha desbordado hacia su interior. En los últimos meses se ha incrementado la violencia en la región, toda ella relacionada de una u otra forma con la minería dentro y en los bordes del parque nacional. La actividad minera sigue en ascenso dentro de sus límites, y ahora incluso, en el marco de presuntos acuerdos políticos entre el gobierno y algunos líderes indígenas”.